En tiempos de globalización no sólo las empresas que operan más allá de sus fronteras deben plantearse un análisis del mercado desde la perspectiva global, pues quienes se mantienen operando localmente quizás se enfrentan a competidores globales y atiendan un mercado con referencias y en muchos casos preferencias globales.
La globalización es la integración cultural, económica y política de diferentes comunidades alrededor del mundo. Este es un fenómeno que se desarrolla de manera parcial, pues existe un progresivo proceso de apertura y liberación de los mercados, requisito para poder participar plenamente en la globalización. Lo anterior independientemente de lo que signifique la globalización en su comunidad, hace necesario un análisis de lo expuesto que se encuentra su mercado a la influencia global, en función a la apertura que el Estado realice mediante sus políticas. En algunos casos se comienza por acuerdos binacionales, para luego proceder a integraciones regionales que permitan reducir el impacto de las asimetrías y progresivamente incrementar la competitividad.
Sin embargo, el verdadero reto para muchas empresas consiste en verificar si lo que ofrecen localmente, tiene un mercado más allá de sus fronteras en el cual pueda competir y lograr la aceptación de su oferta original o es necesaria su adaptación a las características tecnológicas y culturales de otro mercado. Aunque la idea es tratar de aprovechar al máximo las economías de escala, ofreciendo el mismo concepto y similares presentaciones a nivel mundial. Es por ello importante comenzar por determinar la factibilidad política y legal de ingresar a un mercado de forma segura, para luego pensar en los aspectos tecnológicos y culturales que determinarían la factibilidad de mercado y finalmente lo económico como llegar hasta ese mercado de forma competitiva.
En muchos casos son los mismos consumidores que visitan el mercado natural de una empresa los que compran el producto y de manera espontánea e informal empiezan a importarlo inclusive para otras personas. Así muchas empresas llegan a detectar un mercado hacia dónde exportar ubicando inicialmente distribuidores a los cuales pueda ofrecer una licencia o franquicia, según los resultados obtenidos quizás se justifique firmar una alianza con una empresa local o realizar la inversión en abrir sucursales en esos mercados. Este mismo fenómeno se produce a lo interno de un país, con empresas que pasan de ser locales, a regionales o nacionales.
Finalmente más allá de la migración como fenómeno que abre nuevos mercados y mediante la interacción social transmite consumos culturales, resulta vital la promoción en la estrategia global, pues se debe dar a conocer una nueva marca, una forma diferente de satisfacer una necesidad. Visualizar que la promoción de los consumos va desde cualquier manifestación cultural hasta una campaña publicitaria directa es la clave para acelerar la globalización de su oferta. Siempre es útil referir como los Estados Unidos han exportado su cultura desde los jeans, las hamburguesas, el rock, el basketball, Batman, Star Wars por mencionar algunos casos. Sin embargo en estos días vi a unos japoneses bailando reggaetón y estaban disfrutándolo. Al igual que deben los puertorriqueños disfrutar de un buen Sushi.
¿Será factible establecer una cadena de franquicias de cachapas en Rusia?
2 comentarios:
Un ejemplo que me gustaria mencionar es el de la empresa Nacional Ferreteria EPA, el cual se inicio en un local muy pequeno y actualmente se encuentra en muchos estados a nivel nacional y tengo entendido que iban aperturar una tienda en el exterior. Se observa que esta empresa aplica el Global Marketing y el Inner Marketing por el desarrollo al personal para atender bien al cliente.
Freddy, creo que EPA es buen ejemplo, pues estoy seguro que su concepto de tienda probado localmente, debe haber sido adaptado a esos nuevos mercados centroamericanos. Esperemos que pueda expandirse con éxito a nivel global.
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